Finalmente, llegó el día. Ante el aumento de casos de Covid-19 en la provincia de Buenos Aires, el predio de Tecnópolis ya está operativo y abrió las puertas a pacientes leves de la enfermedad.
En el día de ayer, Nicolás Kreplak, el viceministro de Salud bonaerense, le dio aviso a los directores de los hospitales más cercanos a ese predio de Villa Martelli -Cetrángolo, Belgrano y Eva Perón- que ya podían derivar infectados que hasta el momento ocupaban camas de cuidados generales o medios en esos centros de salud. Pero también ya pueden hacerlo quienes estén internados en los centros extrahospitalarios que los municipios habían dispuesto para los pacientes asintomáticos y quienes decida el SIES, el Sistema Integral de Emergencias Sanitarias de la provincia.
Desde esta mañana, entonces, quienes no necesiten atención médica hospitalaria podrán permanecer en el predio cuya directora ejecutiva es la licenciada Laura Braiza, concejal del Frente de Todos en Vicente López. De requerir mayor complejidad en su tratamiento contra el Covid-19 se los trasladará de inmediato a un centro de salud. “En este momento se hacen las rondas en los hospitales y se evalúan los pacientes. Ahora estarán decidiendo qué pacientes serán llevados para que completen los diez días de aislamiento que indica el protocolo. En horas del mediodía tendremos las primeras cifras”, explicó a Infobae María Victoria Anadon, subsecretaria Administrativa de Legal y Técnica del ministerio de salud de la provincia, y quien estuvo a cargo de la logística y el armado desde que la Nación le cedió el predio a la administración que conduce Axel Kicillof junto con la Cruz Roja Argentina y los Cascos Blancos. “Sobre todo lo que tiene que ver con la protección personal de quienes trabajen allí dentro. Se hizo todo un entrenamiento para el uso del equipamiento, como se ponen y sacan los trajes de protección, porque es ahí donde se puede dar la infección”.
“Ya tenemos lista toda la infraestructura necesaria para que no tengan contacto estrecho con su familia y convivientes. Se recibirán sólo pacientes asintomáticos, o con síntomas muy leves de Covid, que no necesitan atención y no están en condiciones de hacer el aislamiento en su domicilio”, contó la funcionaria.
La capacidad actual, explicó, es de “unas 500 camas listas para ser usadas. Es lo que prevemos por el momento que se van a necesitar. Pero estamos en condiciones de aumentar la capacidad de acuerdo a los que el sistema de salud requiera, hasta un total de 2000. Cada cama está dividida por paneles, tienen conexión wifi, enchufe para cargar, mesa de luz, velador, y las personas pueden estar solas a menos que pidan estar acompañadas, porque también tenemos la posibilidad de aislar a grupos familiares. Trabajamos con un grupo de psicólogos y trabajadores sociales porque aunque los síntomas de Covid-19 sean leves, hay una serie de consecuencias en el estado de ánimo que hace a la salud de las personas. Hay una nave para hombres, otra para mujeres y un sector para no binarios que no se sienten identificados con ninguno de los géneros”.
En la nave principal, frente a la puerta 6, hay un espacio con estanterías y mostradores. Será la recepción donde los futuros pacientes deberán dejar todas sus pertenencias, ropa y efectos personales, excepto el celular, el cargador, libros, anotadores o tablet (previa desinfección). El estricto protocolo establece que cada persona reciba un kit de limpieza e higiene y ropa para usar durante la internación. Sus pertenencias quedarán guardadas en bolsas herméticas, fajadas y numeradas. Por el momento, allí trabajarán unas 70 personas entre médicos, enfermeros, psicólogos y trabajadores sociales.
Las ambulancias ingresarán por la entrada que da a la avenida General Paz, traspasando un primer anillo de seguridad que estará a cargo de la Policía Federal y un segundo que estará protegido por la Policía bonaerense y los Bomberos.