Por la pandemia de coronavirus, que generó la suspensión de clases presenciales en la mayor parte del 2020, cerca de “un millón” de chicos tuvo “bajo o nulo” vínculo con la escuela el año pasado, admitió el ministro de Educación nacional, Nicolás Trotta.
“La evaluación nacional de la continuidad pedagógica que hizo el Gobierno nos confirmó el año pasado que casi el 10% de los estudiantes tuvieron bajo o nulo vínculo con la escuela”, reconoció el Ministro de Educación nacional.
Al respecto, Trotta aclaró que el porcentaje representa “casi un millón de estudiantes” que quedaron por fuera de las clases virtuales en la cuarentena y suspensión de las clases presenciales que se extendió entre el 20 de marzo hasta finales de octubre.
“Ningún adolescente abandona la escuela, es expulsado de la escuela. No se generan las condiciones del acompañamiento de la trayectoria educativa”, expresó el máximo funcionario a cargo de las políticas educativas.
En ese sentido, Trotta explicó que “no es que el adolescente quiere dejar (de estudiar), es un fracaso institucional del sistema educativo”. Por eso, el funcionario nacional “ir a buscar a cada chico para que regrese a la escuela”.
Sobre el número de jóvenes que dejaron la escuela primaria y secundaria el año pasado, el Ministro manifestó que “todavía no se puede hablar del dato final porque se está en pleno proceso de recuperación de esas trayectorias educativas”.
Por lo mismo, el funcionario aseveró que se trabaja en conjunto con las 24 jurisdicciones en el programa “Acompañar” que tiene como objetivo “ir a buscar a cada chico para que regrese a la escuela”.
Vale destacar que este miércoles, la Provincia retomará las clases presenciales en varios de los distritos del Conurbano, luego de que suspendiera las actividades en las aulas a principios de abril, por la segunda ola de la pandemia de coronavirus.
Un tercio de la población no tiene acceso fijo a internet
A pesar del 10% de niños que abandonó la escuela del que habló Trotta, en la última semana la Cámara Argentina de Internet (Cabase) difundió un estudio en el que se corroboró que el 32% de los hogares del país no cuenta con conectividad fija a internet.
En ese contexto, cerca de un tercio de las familias dependen de su conexión móvil o bien del uso de wifi en espacios públicos para acceder a internet y utilizar un recurso tan preciado para la educación virtual.
A la par, el estudio del Cabase demostró que durante el cuarto trimestre del 2020, Argentina registró un incremento en el total de los accesos fijos a internet, que representó una variación interanual del 8,9%.
De esta manera, la entidad relevó una penetración del 68% por cada 100 hogares del servicio de internet, mientras que en los últimos 5 años hubo, en promedio, un aumento del 2,8% anual, una tendencia muy lenta.
“Con la pandemia, internet ha demostrado ser una herramienta esencial para la producción, el trabajo y la educación y como tal, necesita de leyes y regulaciones que contribuyan y promuevan su desarrollo”, solicitó el presidente del Cabase, Ariel Graizer.
A la par, Graizer explicó que se requiere “inversión privada en las 1.200 PyMEs y cooperativas, quienes pueden llevar la conexión al 32% de los hogares que aún no cuentan con un servicio de banda ancha fija”.
